La trampa del Bisfenol: toxicidad acumulada

Cuando los toxicólogos advirtieron que el BPA contenido en los envases plásticos podría ser perjudicial, los consumidores clamaban por algo nuevo. Pero los problemas persisten.

Tuvieron que transcurrir dos décadas de protestas de toxicologos y consumidores para que la legislación norteamericana y europea eliminara del mercado los plásticos con bisfenol A, un tóxico reconocido por causar infertilidad, malformaciones fetales, trastornos del comportamiento, diabetes, inmunodeficiencia, cáncer y deterioro cognitivo. El anuncio de su retiro se hizo en 2011. Pero todavía en los supermercados podemos encontrar cantidades asombrosas del tóxico: se encuentra como recubrimiento interno en los enlatados, para evitar el contacto del alimento con el aluminio. Y en muchos plásticos transparentes a base de policarbonato, está su hermano gemelo, el bisfenol S, igualmente perjudicial para la salud humana. Así lo reporta un informe aparecido en la revista científica Nature. La American Metal Packaging Alliance con cede en Washington DC estima que el 95% de las resinas de revestimientos de aluminio y el acero para almacenar alimentos y productos agrícolas contienen BPA. BPS se encuentra en productos elaborados con papel reciclado, cajas de pizza, empaques de alimentos y en los rollos papel de registradora. Las malas noticias no terminan allí: de acuerdo con Globally Harmonized System of Classification and Labelling of Chemicals de las Naciones Unidas, más del 50% de los plásticos contienen ingredientes que pueden ser peligrosos: algunos son cancerígenos y otros son estrogénicos (como los bisfenoles). http://www.nature.com/news/toxicology-the-plastics-puzzle-1.15038